a paso lento destrozó sus pupilas... y fue apropósito. Estaba tan herida por dentro que su alma fue expulsada a travéz de un malestar estomacal, después de escupir sangre con oxigeno decidió ingerir agua en espiral para ver si removía las arterias de su corazón... luego vomitó el sentimiento de odio que aquella persona le sembró con un toque boomerang.
Agradadecida se arrodilló al alcanzar tal amor enfermizo que con el tiempo se convirtió en el mar desesperante de un beso humedo... tan humedo que volvió a encontrar su equilibrio.
El ultimo parrafo es solo para que el final sea algo más agradable.
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