jueves, 3 de febrero de 2011

Marea

Nosé pero no me dan ganas de buscar el escondite, mi norte es otro y el tiempo no ha parado.
Yo nosé que será de mí ahora pero hay trozos, solo trozos desdibujando y sin ganas de volver a dibujar tus ojos. A veces no hay vida, el mar ya poco me salpica de tí. Se va todo esfumando, no tengo ganas de pensarte, ni de escucharte, ni de mirarte, nada.

Por otra parte, en el escondite más último del océano pacífico se esconde todo lo que quisiera, es un escondite casi casi casi invisible y nosé porqué tengo que saber que existe. Quisiera que estuvieras, quisiera reirme contigo, viajar, bailar...nos faltaron tantas cosas por hacer, tantas.

... que éstos pensamientos y ganas de hacer lo que jamás pasará sean invisibles, sean pensamientos rotos, sean ganas desganadas, que se van al primer pestañeo. Despertar y saber que soñé contigo ahora no es lo mismo como hace un tiempo, no me dan ganas de recordar de qué trató, y cuando simplemente lo sé me quedo inmovil pero sin más. . . . . . .

No hay comentarios: