lunes, 16 de marzo de 2009

Explosión


Al empezar, empecé mal. Caminando lento, aun sintiendo al mismo tiempo la voluntad de caminar firme y segura. No daba ni mi segundo paso cuando empecé a mirar hacia atrás, buscandote entre la poca multitud que quedaba, buscandote entre gente desconocida, caminé al revés y cuando te encontraba y me mirabas me quedaba quieta, aún estando en el túnel sentía que me sacabas y me llevabas lejos lejos.


Un día, sin esperarlo pero inconcientemente sabiendo que tarde o temprano pasaría, todo se estaba calentando, ya trizando, sin saberlo, sin siquiera sospecharlo a medio camino ya sólo quedaba resto de la explosión, al mismo instante miré otra vez hacia el frente y me di cuenta que el túnel había que empezarlo ya sin rodeos. Te miré y con ganas de decirte aún todo lo que me queda por decir me despedí rápido y volví. Cuando empezé a caminar otra vez, me resistí a mirar hacia atrás, pero cerré los ojos imaginandote tomar el auto de olvido. Todo transcurrió en camara lenta. Algo ocurrió en mi pecho. Algo se apretaba y se volvía nudo lentamente, algo se estrujó por dentro, algo no andaba bien, empecé a respirar por la boca agitada. Apuré el paso. Esperaba el remedio: saludar, tirarse a la cama, cerrar los ojos y dejar de preguntar el porqué, quedarse resignada, sin esperar nada cambio abrí el cajón bajo una luna naranja.

No hay comentarios: